Con el mal tiempo, conducir el camión se convierte en una tarea más compleja. La lluvia y otros fenómenos meteorológicos como la nieve y la niebla repercuten directamente en el estado de las carreteras y en el modo de conducción que debemos emplear.
Por eso, desde Andamur y siguiendo algunas indicaciones de la Dirección General de Tráfico te damos algunos consejos para conducir tu camión con mal tiempo y ayudarte a realizar tus rutas de una manera más segura:
- Aumenta la distancia de seguridad. Las lluvias y la nieve provocan la pérdida de adherencia de los neumáticos, por lo que aumentar la distancia de seguridad es clave ante cualquier imprevisto.
- Cuidado con las primeras gotas. Con la llegada de las primeras gotas lo hace también el peligro, ya que estas se mezclan con los materiales y sustancias que impregnan la superficie ocasionando una película altamente resbaladiza. Multiplicar por dos la distancia de frenado nos aportará seguridad.
- Anticipación. No hay que bajar la guardia en ningún momento, especialmente cuando las condiciones climatológicas no acompañan. Observa el entorno con atención, fijando la mirada lo más lejos posible para aumentar el campo de visión y que esto permita “ver sin mirar”, algo propio de la visión periférica.
- Consulta el parte meteorológico. Antes de emprender tu ruta, es imprescindible consultar el pronóstico para evitar sorpresas al volante y poder adaptar tu conducción a las condiciones meteorológicas que se presenten.
- Prepara tu cabina. Conducir con total comodidad influye más de lo que pensamos. Mantener una temperatura entre 20 y 22º dentro de la cabina es lo ideal, tanto en verano como en invierno. Una temperatura superior puede ocasionar somnolencia y fatiga, reduciendo la capacidad de reacción.
- Reduce la velocidad. Es necesario adaptar la velocidad a la visibilidad en cada momento y llevar una velocidad que permita detener el vehículo en riesgo de alcance u otra situación inesperada.
- Utiliza marchas largas para no patinar. A la hora de subir pendientes y en curvas, utiliza marchas largas para controlar el camión en todo momento y evitar que las ruedas derrapen y se pierda el control del vehículo. Además, es importante cambiar de marcha con suavidad.
- Encender las luces en caso de lluvia intensa. Si está diluviando o la zona por la que circulas se ha oscurecido debido a las nubes, es muy recomendable activar las luces para mejorar la visibilidad.
Estas recomendaciones son claves para evitar el aquaplaning, un fenómeno que se produce cuando el neumático no se adhiere a la carretera debido a la lluvia, lo que provoca que las ruedas floten y que se pueda llegar a perder el control del vehículo.
En el caso de que esto suceda, la DGT recomienda sujetar el volante con firmeza, no frenar a fondo y corregir la trayectoria suavemente cuando se recupere el agarre.
En Andamur estamos comprometidos con el bienestar y la seguridad de los transportistas profesionales. Seguir estos consejos es esencial para conducir con una mayor seguridad y prevenir cualquier peligro en la carretera.
Al volante, ¡cuídate!